«Sólo en esta academia de Anabel encontré un taller donde me enseñaban a hacer un QUIET BOOK seguro y fiable.
Intenté hacerlo por mi cuenta con silicona y el resultado fue desolador. Mi bebé tiraba de las aplicaciones y se quedaba con los trozos en la mano, con el peligro que supone que se las lleve a la boca»
Éstas son algunas de las opiniones de Cristina en la entrevista que podrás escuchar en el siguiente vídeo.